Cuando una persona fallece, su patrimonio, incluidas las inversiones como las participaciones en proyectos de crowdfunding, pasa a formar parte de la herencia y está sujeto a tributación en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD).
Además, dependiendo de lo que se decida hacer con las participaciones heredadas, también podrían surgir obligaciones fiscales adicionales, como las relacionadas con el IRPF. Entender cómo declarar el crowdfunding, especialmente en su modalidad inmobiliaria, es clave para cumplir con las normativas fiscales aplicables.
Repasemos las implicaciones fiscales que tiene heredar este tipo de activo y cómo los herederos pueden gestionar esta situación.
Impuesto de sucesiones y donaciones: lo primero que debes pagar
Al heredar participaciones de crowdfunding, el primer paso es incluirlas dentro de la masa hereditaria. Este valor tributa en el ISD, que varía dependiendo de la comunidad autónoma en la que se liquide la herencia. El porcentaje puede oscilar entre el 7% y el 34%, dependiendo del grado de parentesco con el fallecido y del valor total de la herencia.
Por ejemplo, si heredas participaciones por valor de 50.000€ en una comunidad con una tasa del 15%, deberás abonar 7.500€ en concepto de ISD. Cabe destacar que algunas comunidades ofrecen bonificaciones o reducciones significativas para familiares directos, lo que puede disminuir considerablemente la carga fiscal.
Excepción: acceso anticipado a los fondos
En casos excepcionales, la Agencia Tributaria puede autorizar el acceso anticipado a los fondos para liquidar el ISD. Esto también se aplica a otros instrumentos financieros, como fondos de inversión, y podría ser una opción para herederos que no cuentan con liquidez inmediata.
Esta medida aplica también a activos que no son fácilmente liquidables, como participaciones en crowdfunding o fondos de inversión. Al permitir el acceso anticipado, los herederos pueden disponer de los fondos para cumplir con sus obligaciones fiscales.
Sin embargo, el acceso anticipado no exime del pago del ISD, sino que lo aplaza o fracciona. En algunos casos, se pueden aplicar intereses de demora, por lo que los herederos deberán liquidar el impuesto dentro de un plazo determinado.
Tributación en el IRPF: lo que tienes que saber si decides vender
Una vez que las participaciones pasan a ser de titularidad del heredero, éste puede decidir qué hacer con ellas: mantenerlas, transferirlas o venderlas. Cada opción tiene implicaciones fiscales diferentes.
Plusvalía del muerto
Uno de los aspectos más ventajosos al heredar inversiones es la aplicación de la conocida «plusvalía del muerto». Según esta norma, el valor de adquisición para el heredero será el que tenían las participaciones al momento del fallecimiento del titular original. Esto significa que no se tributan las ganancias generadas por las participaciones hasta ese momento.
Por ejemplo, si las participaciones hubieran generado una rentabilidad del 20% desde su adquisición inicial por parte del fallecido, esta ganancia no estará sujeta a impuestos. El heredero sólo tributa por la diferencia entre el valor de las participaciones al momento de la herencia y el precio al que eventualmente las venda. Este ahorro puede oscilar entre el 19% y el 23%, dependiendo del tramo de ganancia en el IRPF.
¿Qué ocurre si hay más de un heredero?
Cuando sucede esto, las participaciones deben dividirse según las proporciones estipuladas en el testamento o, en su defecto, siguiendo las normas legales de sucesión. Cada heredero podrá decidir de manera independiente qué hacer con su parte.
Fraccionar las participaciones podría requerir una gestión adicional, pero también permite que cada heredero adapte su decisión a sus necesidades financieras y objetivos de inversión.
Cómo gestionar la herencia de crowdfunding de manera eficiente
Para optimizar la fiscalidad de las participaciones heredadas, es recomendable:
- Consultar a un experto fiscal: Cada comunidad autónoma tiene normativas específicas que pueden influir en el ISD.
- Evaluar la rentabilidad de las participaciones heredadas: Mantener la inversión puede ser una opción rentable si los proyectos asociados siguen generando beneficios.
- Considerar traspasos o ventas: Si las condiciones del mercado son favorables, vender o traspasar las participaciones podría ser una estrategia inteligente para maximizar la rentabilidad neta.
Para más información sobre estrategias de administración patrimonial, puedes consultar el artículo gestionar un patrimonio inmobiliario.
Heredar participaciones de crowdfunding implica cumplir con varias obligaciones fiscales, desde el Impuesto de Sucesiones hasta, potencialmente, el IRPF. Sin embargo, también ofrece ventajas como la aplicación de la «plusvalía del muerto», que puede reducir significativamente la carga tributaria.
Administrar correctamente estas inversiones asegura el cumplimiento de las normativas fiscales y permite a los herederos aprovechar al máximo el valor de los activos recibidos.
Si tienes dudas sobre cómo gestionar una herencia relacionada con crowdfunding, plataformas como wecity pueden orientarte en el proceso y ayudarte a maximizar los beneficios.