El concepto de sostenibilidad se ha popularizado conforme ha ido pasando el tiempo. Ya sea al hablar de políticas energéticas o medio ambiente, la sostenibilidad aparece como método o modelo de desarrollo clave de cara al futuro. Por ejemplo, en la ciudad de Madrid, han pasado unos años desde la normativa de “Zonas de Bajas Emisiones” dentro de la movilidad, obligando a los vehículos que circulan por la ciudad, llevar un distintivo según las emisiones que generan. Aun así, el término “movilidad sostenible” puede sonar ambiguo, por lo que en wecity, queremos compartir las claves para entenderlo y repasar los datos que se generan sobre ello.
¿En qué consiste?
La movilidad sostenible se define como la reducción en lo posible de los efectos negativos en el medio ambiente por parte de cualquier desplazamiento que se realice en un área concreta. Dentro de esta definición, se comprenden los desplazamientos de cualquier tipo, tanto de personas como de mercancías.
Si aplicamos el concepto a las ciudades, la movilidad de carácter sostenible se produce cuando el transporte público ofertado sea cero emisiones o eléctrico, y en el caso del transporte privado, como el peatonal, la bicicleta, vehículos motorizados eléctricos, etc.
¿Cómo se mide?
Para comprender la sostenibilidad en las ciudades de España, la consultora Idencity publicó hace unos meses el Índice de Movilidad Sostenible de las Ciudades Españolas de 2021, el cual revela un cumplimiento de poco más del 50% de las normas para consolidar una ciudad con movilidad ecológica y sostenible.
Este índice mide y evalúa la puesta en marcha del sistema de movilidad de 82 ciudades españolas, de las cuales 50 son capitales de provincias. Además, cuenta con un estudio primerizo de un total de siete Áreas de Transporte Público Integrado (ATPIs), donde, por ejemplo, se analiza el impacto de la pandemia en la movilidad de las ciudades, ya que la movilidad media se redujo hasta un 89%.
Ciudades españolas
La situación de las ciudades españolas según el estudio en rasgos generales, es buena, pero existe un gran margen de mejora, sobre todo en adaptación al cambio climático. Las ciudades se encuentran en “una fase de desarrollo” y hay una tendencia que “avanza hacia una movilidad eficiente”, según comentó Jordi Hereu, responsable de la consultora.
En distintas secciones del estudio, estas son las ciudades que más destacan:
- Guadalajara, Salamanca y Santander (en ese orden) ofrecen más de un 90% de cumplimiento de normas centradas en fomentar hábitos saludables relacionados con la movilidad.
- En materia de contaminación atmosférica, la huella de carbono y gases contaminantes originados por la movilidad, Pontevedra, Tarragona y Santiago de Compostela (en ese orden) son las ciudades que más se comprometen. Cabe destacar que el porcentaje medio de las ciudades españolas en este aspecto es del 82%.
- Madrid toma gran ventaja en el grado de cumplimiento de adaptación al cambio climático, con un 46,6%, mientras que la media nacional evaluada se sitúa en 19%.
- Por su lado Barcelona sobrepasa al resto en promover y contribuir a la demanda del uso del transporte público y colectivo. El grado de cumplimiento fue del 73,5%, nuevamente muy por encima la media nacional, 26,3%